sábado, 28 de septiembre de 2013

Yo sigo...

Amigo"L", quiero agradecerte tu comentario en mi blog y decirte que lamento profundamente el fallecimiento de tu madre.

Me pregunto, ¿cuántos más hemos de morir hasta que la ciencia encuentre un tratamiento para curar o frenar esta terrible enfermedad?.

"Yo sigo", simpática frase que pronunciaba el humorista Joe Rígoli con la cual y su mímica nos hizo reir en la década de los 80 en su programa televisivo.

Con él recorrí la costa mediterránea promocionando un producto que había ideado. Se trataba de un rollo de papel higiénico en el cual estaban impresos varios de sus chistes, haciéndonos más divertido nuestro tiempo en el baño.

Un saludo Joe.

La fatídica noche del apagón eléctrico no acabó aquí. Mi esposa solicitó con carácter urgente a la empresa que suministra las máquinas de respirar otra nueva para sustituir a la que fallaron sus baterías.

Al día siguiente me trajeron una nueva, sin embargo yo preferí continuar con la que estaba conectado.

Por la noche ya en el dormitorio me conectaron a la nueva. Al ponerla en marcha observamos un ligero sonido inhabitual. Como que estaba receloso de la noche anterior pedí que me la cambiase.

Al día siguiente ya sentado en mi sillón me cambiaron a la nueva. Mientras el electricista trataba de encontrar la avería un nuevo generador más potente suministraba la corriente eléctrica, mientras mi hijo colaboraba con el operario.

En un descanso mi hijo se sentó frente a mí, estábamos hablando cuando de repente la máquina se paró dejándome sin aire, la máquina iluminó su pantalla y se repitieron los pitidos encendiéndose los chivatos rojos indicando que se habia averiado. Al comprobar que no recibía aire moví la cabeza de derecha a izquierda movimiento que ya habíamos acordado en el caso de producirse un fallo como éste. Rápidamente mi hijo corrió al dormitorio en busca de la otra máquina haciendo el cambio.

De no haber sido por mi hijo posiblemente no estaría dictando este blog. Pienso que hubiese sucedido si en lugar de cambiar la máquina por la noche hubiese dormido con la que tan sólo funcionó durante 2 horas.

En treinta y seis horas gané tres batallas, aún espero la guerra final que intentaré ganar.

Por eso os digo que a pesar de todo "yo sigo".

Compañeros eláticos tenemos una esperanzadora notícia, investigadores de Israel y Estados Unidos desde el 2010 están realizando unos ensayos clínicos con células madre. En esta primera fase han conseguido unos resultados favorables, en algunos enfermos la evolución de la enfermedad se ha frenado y en otros pacientes parece ser que han tenido una mejoría. En el pasado 2012 empezaron una segunda fase cuyos resultados serán conocidos dentro de dos años.

Amigos tenemos una gran motivación para luchar con todas nuestras fuerzas, sin desánimos, pensando en que podremos alargar nuestra vida al lado de nuestra família, amigos y soñar en un futuro mejor.

Por mi parte pondré toda mi fuerza mental y física.

Por eso os digo "Yo sigo", ¿y vosotros?.

Os quiero